Arico
ha organizado este domingo en Calatayud una concentración, a la que han
asistido más de 80 personas, para denunciar la negativa del alcalde
bilbilitano a construir un memorial en recuerdo a los republicanos
asesinados en la Guerra Civil. Arico cuenta con una subvención de 30.000
euros, pero necesita la licencia de obra
Verónica de Castro Alonso
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| Los socialistas Javier Sada y Víctor Ruiz han participado en la concentración |
Zaragoza.- 24 Septiembre 2012
Más de 80 personas han participado este domingo en la plaza del Fuerte
de Calatayud en la concentración organizada por la Asociación por la
Recuperación e Investigación Contra el Olvido (Arico), en la que se ha
pedido al alcalde bilbilitano, José Manuel Aranda, que conceda a la
Asociación la licencia de obra que necesita para construir un memorial
en el Cementerio de la localidad en recuerdo a las víctimas del
Franquismo.
Desde
Arico han explicado que cuentan con una subvención de 30.000 euros del
Gobierno de Aragón para poner en pie este memorial pero, como el terreno
del Camposanto es municipal, “sin el consentimiento del Ayuntamiento no
podemos hacer nada”. Miguel Ángel Capapé, miembro de Arico, ha
remarcado que tienen hasta el 31 de diciembre de plazo para justificar
el gasto del dinero y que, si no, tendrán que devolverlo.
Por
ello, este domingo han querido mandar un mensaje al equipo de Gobierno y
decir al alcalde que “hay gente en Calatayud y en la comarca que quiere
que se construya el memorial, en el que aparecerán los 450 nombres
recopilados hasta la fecha de los republicanos que fueron asesinados en
la zona durante la Guerra Civil”.
Capapé
ha recordado que el alcalde cambió la ubicación del memorial para
después no conceder la licencia de obra. Además, desde Arico han
aseverado que el diseño del mismo ha sido aprobado por el arquitecto
municipal, por lo que consideran que la situación actual “es un tema
político”.
Entre
las motivos que están recibiendo desde el Consistorio sobre la negativa
de la concesión de la licencia de obra, Capapé ha subrayado algunas
como que “hay seis o siete vecinos que no quieren que se construya el
memorial, que son muchos nombres los que se van a poner en la placa y
que habría que poner menos o que a estas alturas no se van a remover
estos temas”. “Lo que nos parece es que son excusas peregrinas para no
dejarnos hacer el memorial”, han incidido desde Arico.
El
memorial sería una placa de granito formada, a su vez, por varias placas
más pequeñas que levantaría algo menos de un metro del suelo. Además,
estaría un poco inclinado para poder leer los nombres de las personas a
las que se quiere rendir homenaje. “Su interior iría hueco. Así, si
algún día se pudiesen recuperar algunos de los restos, se podrían meter
dentro del memorial”, ha recalcado Capapé.
“Podríamos
organizar alguna otra concentración, pero no tenemos ya casi tiempo
material para construirlo antes del 31 de diciembre”, han concluido, con
resignación, desde Arico.
En la concentración han participado representantes de Izquierda Unida y del Partido Socialista.
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