viernes, 8 de marzo de 2013

Los asesinatos de Ferrol 10 Marzo 1972, Día de la clase obrera gallega

Fechas para recordar 10 Marzo 1972
El 10 de marzo de 1972, a las siete y media de la mañana en Ferrol, se reunían en las puertas de la factoría de Bazán en torno a cuatro mil trabajadores. Desde allí marcharon hacia el polígono de Caranza en busca de solidaridad de los trabajadores de otras empresas y con la idea de realizar una asamblea general.

Monumento a los trabajadores asesinados en Ferrol




 Alfonso Roldan Panadero 6 Marzo 2013

En ese momento, en el cruce de la avenida de las Pías con la carretera de Castilla, son interceptados por la policía armada, lo que provoca un enfrentamiento abierto. A las cargas policiales, los obreros responden lanzando palos y piedras. Los gendarmes, ante la resistencia obrera, comienzan a disparar al cuerpo. Los trabajadores resisten hasta forzar la retirada de la policía.
Atrás queda un trabajador muerto, Amador Rey; otro agonizando, Daniel Niebla, más de cuarenta heridos, alguno en estado muy grave, como Julio Aneiros, dirigente de Comisiones.
El día 7 se había firmado el convenio interprovincial en Madrid. Este convenio recoge unas mejoras muy inferiores a las que se reclamaban desde Ferrol. Como resultado, el día 8 se convoca una nueva asamblea de trabajadores. En ésta, las intervenciones de los representantes de los trabajadores incluyeron fuertes críticas contra el convenio y contra el sindicato vertical, y quedan emplazados a una nueva asamblea para el día 9.
Las consecuencias de esta asamblea no se dejan esperar. Los enlaces vocales del jurado José María Riobó y Manuel Amor Deus, junto con cuatro enlaces más, José Díaz Montero, Ramiro Romero, José Miguel Rey y Alfonso Couce, todos ellos de Comisiones Obreras, quedaban suspendidos de empleo y sueldo, lo que se les anunciaba a los trabajadores el día 9 prohibiéndoles el acceso a la factoría.
Ramiro Romero es agredido por los guardias jurados a la entrada del astillero al negarse a firmar la notificación de sanción, lo que provoca un enfrentamiento entre trabajadores y guardias. Ante esta noticia, el paro fue total y a las nueve y media de la mañana unos cinco mil trabajadores se concentran para exigir la anulación de los despidos y una sanción para los guardias.
La empresa convoca de urgencia al jurado para lograr que los vocales presentes convenzan a los trabajadores de frenar el paro. El enlace Loureiro Lugrís afirma que debe ser el director quien se dirija a los trabajadores. El director accede y se presenta ante la asamblea, aunque sin solucionar las cuestiones que se le plantean.
Ante esa postura, Rafael Pillado, Antonio Romero y Ángel Porto intervienen para animar a los trabajadores a mantener su actitud de pasividad laboral hasta que se les proporcionasen garantías a los detenidos y represaliados. Los trabajadores acuerdan mantenerse concentrados hasta que se dé una respuesta positiva a sus demandas.
Acto seguido, en torno a las tres de la tarde, la empresa amenaza con un desalojo policial. Ante la persistencia de los trabajadores, a las cinco se produce una fuerte carga, con más de veinte heridos, seguida del cierre de la factoría.
A partir de ese momento, los choques entre trabajadores y fuerzas represivas se trasladan a las calles de la ciudad y duran toda la tarde. Se escuchan los primeros disparos de la policía…
El día 10, la prensa amanece con un gran espacio para informar de los hechos del día anterior, con especial atención a los choques entre trabajadores y policías, que se sucedieron a lo largo de doce horas, y refiere también los disparos y los heridos de ambas partes. La dirección de la empresa publica la decisión de cierre. La tragedia se sucede poco después.
La noticia de lo sucedido se extiende rápidamente por la ciudad. Los comercios y los colegios comienzan a cerrar y los trabajadores de otras empresas paran en señal de solidaridad. Los dirigentes de Comisiones, ante el posicionamiento de un buque de guerra frente al puente de las Pías, se entrevistan con el capitán de la Zona Marítima del Cantábrico con el objetivo de evitar la intervención militar. El ejército permanece acuartelado y la ciudad es tomada por la Guarda Civil y la Policía Armada, que desplazó efectivos de León y Valladolid.
La crónica

“Hay huelga general en todas las empresas. Los comercios permanecen cerrados. Las mujeres de los obreros han manifestado en las calles y los asesinos han cargado contra ellas a golpes de porra y a culatazos. Todo El Ferrol se moviliza contra la represión y en La Coruña, la tarde de hoy domingo, en el campo de fútbol, miles de espectadores gritaban “¡Asesinos!” a la policía y le arrojaban almohadillas y botellas, teniendo que ser interrumpido el partido que estaba siendo transmitido por televisión.”
“Según las últimas noticias, la solidaridad contra la represión fascista se desarrolla en toda España, con manifestaciones de estudiantes y obreros en Santiago de Compostela, Madrid, Barcelona, Bilbao, etcétera”.
*Extracto de la Crónica publicada en el Boletín de Información de la Agencia de Prensa España Popular (A.P.E.P.), miembro del Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (F.R.A.P.)
Amador e Daniel
Erguéstesvos cedo
aquel día.
– A costume do
do traballo -
mañá – cediño
pra facernos
coa vosa
morte.
(Os levantasteis temprano/ aquel día./ La costumbre/ del trabajo-/ mañana – temprano/ para hacernos/ con vuestra/ muerte).
El cantautor gallego Bibiano Morón, en su primer LP, Agora, del año 1976, rindió un homenaje a Amador Rei y Daniel Niebla.
En aquel año, Bibiano interpretó este tema en un recital que dio junto a Benedicto en beneficio del dirigente comunista, entonces en prisión, Santiago Álvarez. Es interesante esta grabación, que llegó hasta nuestros días gracias a que el recital fue grabado y distribuido clandestinamente, en donde se hace palpable la indignación del público (al tiempo que el enorme ejemplo de artista responsable del propio Bibiano): los nombre de Amador y Daniel seguían vivos y ardientes.

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