sábado, 11 de febrero de 2023

150º ANIVERSARIO DE LA PROCLAMACIÓN DE LA PRIMERA REPÚBLICA ESPAÑOLA:

 



“Nadie trae la República, la traen todas las circunstancias…

…Saludémosla como el sol que se levanta por su propia fuerza en el cielo de nuestra Patria”.

Con estas palabras de Castelar evocamos el momento esperanzador que supuso el umbral al nacimiento de un nuevo régimen el 11 de febrero de 1873.

Era lunes ese 11 de febrero en que el diario “La Correspondencia de España” dio la noticia de la abdicación de Amadeo I de Saboya. Enseguida se agolparon en las calles de Madrid los federales pidiendo la proclamación de la República mientras que en el seno del gobierno de Ruiz Zorrilla (Partido Radical) las opiniones del Presidente y de los progresistas (apoyados por el Partido Constitucional del General Serrano) se inclinaban a constituir un gobierno provisional que organizara un plebiscito para que el pueblo español eligiera la forma de gobierno y los ministros de procedencia demócrata, con el apoyo de Nicolás María Rivero, Presidente del Congreso, abogaban porque el Congreso y Senado, en reunión conjunta constituyeran una Convención que decidiera la forma de gobierno. De ser así, la mayoría de ambas cámaras –que era republicana- se decantaría por la proclamación de la República, mientras que si el gobierno provisional organizaba la consulta, la proclamación de la República no sucedería de manera inmediata.

AMADEO I DE SABOYA




Mientras una multitud que exigía la República, se manifestaba ante el Palacio de las Cortes, siendo disuelta por la milicia nacional, en el interior del edificio, el Presidente Ruiz Zorrilla pedía a los diputados de su propio partido que aprobaran una suspensión de, al menos, 24 horas, para poder restablecer el orden y que no tomasen ninguna decisión hasta que oficialmente llegara el escrito de renuncia del rey. Se trataba de una estrategia dilatoria; el presidente intentaba ganar tiempo, pero su propio Ministro de Estado, Cristino Martos, se dirigió a la Cámara para decir que en cuanto la renuncia formal llegara “aquí no habrá dinastía ni monarquía posible, aquí no hay otra cosa posible que la República”.

Declarándose las Cortes en sesión permanente por la moción de Estanislao Figueras, al día siguiente amenazaron los jefes de distrito republicanos con que si no proclamaban la República antres de las tres de la tarde iniciarían una insurrección, y en el mismo sentido se recibió un telegrama de los republicanos de Barcelona.

Una vez leída la renuncia de Amadeo I, y ante la ausencia del presidente del Gobierno,  el ministro Martos anunció que el Gobierno devolvía sus poderes a las Cortes, con lo que estas se convertían en Convención y asumían todos los poderes del Estado y se presentó la siguiente moción por parte de los diputados republicanos y radicales:

La Asamblea Nacional asume todos los Poderes y declara como forma de Gobierno de la Nación la República, dejando a las Cortes Constituyentes la organización de esta forma de Gobierno, interviniendo a continuación el hasta entonces Presidente de Gobierno, Ruiz Zorrilla, que manifestó: “Protesto y protestaré, aunque me quede solo, contra aquellos diputados que habiendo venido al Congreso como monárquicos constitucionales se creen autorizados a tomar una determinación que de la noche a la mañana pueda hacer pasar a la nación de monárquica a republicana”.

Subió entonces al estrado Emilio Castelar que pronunció un discurso que pasaría a la Historia y que fue respondido con una enorme ovación por parte de la cámara:

Señores, con Fernando VII murió la monarquía tradicional; con la fuga de Isabel II, la monarquía parlamentaria; con la renuncia de don Amadeo de Saboya, la monarquía democrática; nadie ha acabado con ella, ha muerto por sí misma; nadie trae la República, la traen todas las circunstancias, la trae una conjuración de la sociedad, de la naturaleza y de la Historia. Señores, saludémosla como el sol que se levanta por su propia fuerza en el cielo de nuestra Patria”.

258 votos a favor de la República y 32 en contra. Eran las tres de la tarde del 11 de febrero de 1873.

La Asamblea Nacional, reasumiendo todos los Poderes, declaró la República como forma de gobierno de España. Hace hoy 150 años.